Esta mañana muy temprano abrieron sus puertas los templos católicos. Los feligreses manifestaron su alegría por el regreso a la casa de Dios.
Se encontraron con espacios adecuados con medidas de bioseguridad para la prevención del covid-19 y por fin pudieron tener un momento de encuentro espiritual, para el que llevaban esperando más de cinco meses.